Tras iniciar el pasado mes de enero su estado de emergencia tras conocerse las primeras informaciones de la pandemia, provenientes desde China, Vietnam sin muertes por Covid-19 levantó su medida de excepción.
Luego de las medidas tomadas en Vietnam, consideradas como una de las más estrictas aplicadas en el mundo, solo se reportaron casi 300 contagiados y ninguna víctima mortal. Sin embargo, el régimen vietnamita aún hará prevalecer los protocolos sanitarios para prevenir cualquier rebrote.
Se ha dispuesto un levantamiento de la cuarentena de manera paulatina, empezando por la apertura de algunas empresas, sobre todo en Hanói y en la ciudad Ho Chi Minh. En tanto, siguen prohibidas las aglomeraciones y se exige el uso de mascarillas y el respeto de la distancia social.
Los especialistas han coincidido en que las acciones rápidas tomadas por el gobierno han obtenido sus frutos. Una de las medidas cruciales, en este escenario, fue el inmediato cierre de la frontera con China y la labor de prevención desplegada por el partido político del gobierno, de tendencia autoritaria comunista.
“En Vietnam pueden hacerlo y en parte debido a un sistema político que está diseñado para responder a tales situaciones. No siempre es bueno, pero en una crisis ayuda”, reconoció Le Hong Hiep, analista de Vietnam en el Instituto ISEAS-Yusof Ishak de Singapur.
El experto también subrayó que la desconfianza de los dirigentes vietnamitas de las cifras oficiales ofrecidas por China -sobre el avance del Covid-19- les permitió diseñar estrategias oportunas y eficaces.
“Vietnam entiende a China mejor que otros países de occidente. Debido a los sistemas políticos similares, saben cómo funciona China, y conocen los riesgos y desventajas de tales sistemas. Saben que puede haber problemas en los datos que llegan desde su vecino país. Así que al tratar con China, Vietnam es muy cauteloso y eficiente”, sentenció.
